Los enojos nunca son por la razón aparente
Aprende esto y ahórrate años de confusión. El disgusto que parece originarse a partir de una situación en particular no es otra cosa que el propio que llevas dentro y solo aflora cuando encuentras una razón para justificarlo.
En la vida, todos enfrentamos situaciones que nos causan disgusto. Puede ser el miedo, la preocupación, la ansiedad o incluso el odio. Estos sentimientos nos afectan a todos de manera diferente, pero en realidad, todos son lo mismo. En este artículo, te enseñaremos cómo superar los disgustos y encontrar la paz mental en cualquier situación.
Identifica la causa del disgusto
El primer paso para superar el disgusto es identificar la causa. Puede ser una persona, una situación o un acontecimiento que crees que te está causando dolor. Enfócate en la causa específica y reconoce que no estás enfadado, asustado o deprimido por la razón que crees. Por ejemplo, di: ‘No estoy enfadado con ______ por la razón que creo’ o ‘No tengo miedo de _____ por la razón que creo’.
No hay disgustos pequeños
Es importante recordar que no hay disgustos pequeños. Todos perturban nuestra paz mental por igual. No importa si te parece que te está afligiendo mucho o poco, cada disgusto merece ser tratado con la misma importancia. No te guíes por la relativa importancia que le atribuyas. Enfrenta cada disgusto de manera imparcial y busca encontrar la paz mental en cada uno de ellos.
Aplica la idea de hoy
Aplica la idea de hoy a cada una de las causas de disgusto que identifiques. Usa el nombre de la causa del disgusto tal como la percibas y el del sentimiento tal como lo experimentes. Por ejemplo, di: ‘No estoy preocupado acerca de _____ por la razón que creo’ o ‘No estoy deprimido acerca de _____ por la razón que creo’. Practica esto tres o cuatro veces al día para encontrar la paz mental en todas las situaciones.
Discover more from Creencia y Verdad
Subscribe to get the latest posts sent to your email.